Sandro de América, el ídolo de masas creador de éxitos como "Rosa rosa", "Penumbras" y "Ojo por ojo, diente por diente", agoniza abrazado a un respirador artificial.
Hace 11 días que permanece internado y aprovecha que sale en los diarios para lanzar más consignas de inseguridad. Luego de meterse de lleno en la pelea por la pena de muerte esta vez sostiene las mismas consignas, replicando los dichos de Susana "No voy a parar hasta ver muerto a todos los negritos, villeros, cabezas, cumbieros y menores de 15 años" explica.
Según él mismo afirma sus dichos no son polémicos porque "toda la sociedad pide lo mismo", y revela que "sería ilógico que alguien este en contra de estas barbaridades". El ex casi-músico convalece mientras pierde sus cuerdas vocales y su sentido de los Derechos Humanos. Aguardando la muerte se sincera "no quiero vivir esta experiencia yo solo".
Desde el Instituto del Diagnóstico y con el enfisema pulmonar avanzado, el ídolo de masas alienadas subrayó que son pocos los deseos que tiene para país. Pero si quisiera algo "matar a todos los negros esta en el top five". Otros deseos del maestro de la rosa son “que echen a los extranjeros de países limítrofes, que saquen los planes jefas y jefes de hogar y finalmente que cerquen las villas de Lomas de Zamora”.
Sandro permanece en la lista del Incucai a la espera del corazón y el pulmón de algún negrito.
Mientras, sostiene que sus deseos son pocos pero "de lo más justos", y que algún día le gustaría ver “más allá del muro de su casa en Banfield”.
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